En publicaciones anteriores, he resaltado la aplicación del cloro líquido (o también llamado cloro gaseoso) para la desinfección de agua, el cual sin duda es el mejor desinfectante del mercado, por poseer alta concentración de materia activa (mayor al 99%) y por dejar un efecto residual para asegurar la calidad del agua tratada hasta su consumo final.
Sin contradecir todo ello, muchos optan también por emplear Hipoclorito de Calcio para el tratamiento del agua, por ser el segundo producto clorado más importante para la desinfección.
A continuación se brindan detalles importantes para una desinfección efectiva usando este producto:
La concentración de cloro activo:
El cálculo de las concentraciones puede ser el dolor de cabeza más frecuente durante el uso de éste producto y por el cual se incurre en más error a la hora de la aplicación.
A ciencia cierta, no se sabe cuál es la concentración EXACTA del cloro activo del hipoclorito que comercialmente conseguimos. Las etiquetas dicen 65-70% o 65% o 70% o pueden decir ˃70%, pero…. ¿Es confiable ésta información? ¿Qué valor debo asumir, para a partir de él hacer mis cálculos de la concentración de solución madre o secundaria o de cuánto debo aplicar de insumo según el caudal de producción o capacidad de un reservorio?
Para dar respuesta a ésta incógnita, necesitas saber que cualquier hipoclorito de calcio tiene una concentración definida a la hora que sale de la Planta del fabricante, y que cuando llega a tus manos, tiene otra concentración y que cuando abres el balde de insumo y lo vas consumiendo en el tiempo, esa concentración varía y que finalmente, de acuerdo al método de almacenamiento que le des, puede cambiar muy rápidamente de concentración.
Asimismo, una vez preparada la solución madre en un tanque, tiene una concentración al inicio y otra concentración de cloro activo cuando el tanque está por terminarse.
Todo esto, tiene como explicación que el cloro es por naturaleza un elemento volátil, y una exposición prolongada, un mal almacenamiento o un método de fabricación específico, permite que la concentración disminuya rápidamente. Es decir, que mientras el insumo está más expuesto o es mal almacenado (u otros motivos), la concentración disminuye cada vez más, y el insumo pierde potencia y también valor.
Entonces…. ¿Cómo podemos preparar una solución concentrada de cloro de cierta concentración a partir de un producto cuya concentración de materia activa no es conocida con exactitud?
Hay dos maneras de hacerlo:
1) Preparando la solución madre a nivel de laboratorio, con agua de dilución ultrapura exenta de cloro, bacterias y otros interferentes, para luego por diluciones, determinar el cloro libre por colorimetría (éste cálculo conlleva a varios errores por la cantidad de diluciones y excesiva manipulación de la muestra).
2) Enviando el producto a un laboratorio certificado que determine concentración de cloro activo en el insumo. (ésta es la determinación más confiable).
A partir de éste dato, ya sería posible al menos saber:
• Si el proveedor oferta un producto con la concentración de cloro que indica la etiqueta
• La concentración de cloro activo de partida para sucesivas diluciones.
La temperatura:
Es un factor determinante para la variación de la concentración de cloro en los hipocloritos de calcio, así como en los tanques preparados con el insumo diluido. A mayor temperatura, más riesgo de perder concentración de cloro activo.
Como les puedo volver a comentar, el cloro es un elemento volátil, y las altas temperaturas, influyen demasiado para la preservación de la concentración de cloro tanto en el producto puro como en sus soluciones acuosas. Es por éste motivo que, si estás en una zona calurosa, debes almacenar el producto en lugares frescos, así como también deberás preparar las soluciones en tanques y luego taparlos.
Este fenómeno negativo, puede verse con mayor claridad en el verano, en donde las piscinas experimentan con mucha rapidez la disminución de cloro por la gran afluencia de bañistas, pero por sobre todo, por las altas temperaturas de la estación.
Dispositivos de dosificación:
Los dispositivos para dosificación, son muy conocidos, pero no son muchos los que se encuentran comercialmente disponibles. Entre los más destacados tenemos:
A) Hipocloradores por Difusión: Son una herramienta artesanal para desinfección de agua, especialmente útiles para tanques, reservorios y canales.
El producto químico se introduce en el dispositivo, y al ser sumergido en el agua, el producto va saliendo por los agujeros del hipoclorador.
La gran ventaja que tienen estos aparatos, es que su precio, es el menor de mercado en lo que a dispositivos para cloración de agua se refiere. Otra ventaja encontrada, es que te tomará muy poco tiempo su implementación en el sistema de agua. Lo único que necesitas para ponerlo a funcionar, es contar con el hipoclorador por difusión, con el insumo químico (hipoclorito de calcio), una soga o soguilla y el punto donde lo amarrarás. Tal vez la ventaja más resaltante de éste dispositivo es que no necesitarás energía eléctrica para echarlo a andar, y es por ésta razón, que la mayor cantidad de clientes que lo adquieren, radican en zonas rurales.
La gran desventaja que presenta el uso de este aparato, es, que cuando está recién cargado (lleno de hipoclorito), aporta altas concentraciones de cloro, sin embargo, cuando se está diluyendo y consumiendo el insumo, el aparato entrega bajas dosis de cloro. Por lo tanto, el comportamiento o presencia de cloro residual libre del agua tratada con un hipoclorador, es abrumadoramente variable, y tiene picos de concentración muy altos, y también muy bajos o nulos. Es decir, que no se puede estandarizar una dosis adecuada y continua de cloro en la que el cloro libre se mantenga en niveles aceptables todo el tiempo. Para tratamiento de agua con fines de consumo humano, esto es un detalle negativo y que puede conllevar a la producción de agua NO segura.
B) Dosificadores Eléctricos: En cuestión de precios, un dosificador eléctrico está en el rango de precios intermedio: no tan barato como un hipoclorador por difusión, y no tan caro como un clorador a gas.
Una ventaja importante, es que ya representaría un método de dosificación más tecnificado que la hipocloración por difusión, y que dependiendo de la destreza del operador, puede dar excelentes resultados para desinfección de agua.
La gran desventaja es que debes contar con energía eléctrica para su instalación, también está comprobado, que una mala dilución del hipoclorito de calcio (o una mala separación de insolubles), ocasiona atascamientos del producto en las manguerillas de succión y/o descarga, lo que genera intermitencia en la desinfección del agua, y por lo tanto agua NO segura para consumo humano.
Seguridad en la Manipulación:
“Nos da miedo utilizar un clorador a gas, por eso usamos hipoclorito”
Frase que he escuchado muchas, muchísimas veces, y que está asociada con la creencia de que el cloro gas puede fugar con facilidad de un sistema de cloración a gas.
Los sistemas de cloración a gas (especialmente si son de cloración al vacío), han sido diseñados considerando un principio preventivo, que evita que haya fugas innecesarias aún si ha sido mal empalmados los componentes. Un sistema de cloración a gas de inyección al vacío, dejará de dispensar cloro en el preciso momento en que deje de fluir agua a tratar por la tubería matriz. Es gracias la fuerza o presión de ésta agua, que el inyector del sistema de cloración hará su trabajo de succionar cloro de la botella de cloro. Es decir, que “si no hay agua para desinfectar, no hay flujo de cloro, y por lo tanto, no hay peligro de fuga del cloro al medio ambiente”.
Asimismo, es obligación del proveedor de cloradores a gas, capacitar y orientar a sus compradores, cuales son las condiciones mínimas de operación de un sistema que emplea cloro gaseoso como consumible. Él le dirá como instalar el sistema, como empalmar adecuadamente los componentes, cómo prolongar la vida de sus cilindros o botellas de cloro, y en especial, como manipular un sistema evitando daños humanos o medioambientales. En éste punto es preciso indicar que, el Instituto del Cloro (USA) ha aprobado y recomienda el uso de herramientas y equipos especializados para prevención de fugas, y para una correcta manipulación. Esto se hace de conocimiento al usuario del sistema de cloración para salvaguardar su integridad y la de su entorno.
En contraste, la compra de hipoclorito de calcio es libre. Muchos compradores adquieren el insumo y no es obligación del proveedor capacitar al usuario sobre su manipulación, ya que información relevante sobre su uso, está descrita en los envases del producto. Es aquí donde radica el foco de la inseguridad en la manipulación. La preparación recae en el criterio del operador, quien no siempre es una persona con conocimientos sobre las propiedades químicas de los productos químicos para tratamiento de agua. Es común saber de salpicaduras o intoxicaciones durante la manipulación de hipoclorito de calcio que ponen en riesgo su salud y la de los demás.
Como regla general para la manipulación de éste producto, puedo decir que los guardapolvos, guantes, lentes y mascarillas son de uso obligatorio. Mientras más protegido te encuentres usándolos, sería casi improbable que te salpique producto en la piel, ojos o ropa, así como la intoxicación por inhalación también puedes disminuirla drásticamente.
La preparación del producto en un ambiente ventilado, es obligatoria. Aunque parezca poco probable, la irritación de la vista o la intoxicación por inhalación es la emergencia más recurrente durante el uso de hipoclorito de calcio.
El Control de Calidad de Agua Post-Tratamiento:
Sea cual fuere el insumo químico clorado utilizado para el tratamiento del agua con fines de potabilización, la evaluación permanente de la concentración de cloro libre en el agua tratada es obligatorio, y yo considero, que cuando se trata agua con hipoclorito de calcio, la variación de éstos valores es grande, por lo tanto el control de calidad del agua debe ser más frecuente y obviamente forzoso.
La razón es obvia, y recae en el simple hecho de que las concentraciones de cloro activo de solución madre de hipoclorito de calcio decaen rápidamente. Cuando inicias el tratamiento con cierta dosis de insumo (tanque recién preparado), es casi seguro que tienes que aumentarlo cuando el tanque va terminándose. No te queda más remedio, que estar constantemente evaluando el cloro libre para saber si es momento de realizar un nuevo ajuste.
Hipoclorito de Calcio al 65-70% R-Chlor:
De calidades de hipoclorito de calcio, tenemos quizás más variedad, calidades, texturas y marcas que de otros insumos químicos para tratamiento de agua.
En Perú, hay tres factores predominantes para aceptar el hipoclorito de calcio que te ofrece un proveedor:
• Que la etiqueta del producto indique el RANGO de concentración de cloro activo que posee. Esto significa que es más sincero y real, indicar que un producto químico cuya concentración de materia activa varía en el tiempo, tiene una concentración comprendida dentro de un rango de valores, y no que tiene una concentración definida e inalterable. Esto no es posible.
• Que el producto cumpla con la NTP. 311.091.1997 “Hipocloritos para Tratamiento de Agua para Consumo Humano”, y que haya sido sometido a prueba en un Laboratorio reconocido por INACAL y que se demuestre que el producto contiene cloro activo en masa concordante con el rango declarado, según el punto anterior.
• Que el hipoclorito de calcio posee Registro Sanitario según el TUPA 27 de la Dirección General de Salud Ambiental – DIGESA en el rubro: Desinfectantes y otros insumos para Tratamiento de Agua para Consumo Humano.
Nuestro producto: Hipoclorito de Calcio al 65-70% “R Chlor” cumple con los 3 puntos indicados líneas arriba, y viene siendo utilizado con éxito en empresas privadas y Entidades públicas para el tratamiento de agua para consumo humano. Asimismo, nuestro staff está a disposición de sus clientes para consultas técnicas y servicio post venta de forma gratuita.
Quím. Silvana Quijandría Casanova
Especialista en Tratamiento y Control de Calidad de Agua
R CHEMICAL S.A. (Lima – Perú)